Expresiones como «una imagen vale más que mil palabras«, nos llevan muchas veces a una eterna discusión de la que nunca se extrae una conclusión aplastante que aclare dicha pelea.
Por una parte, hay quien dice que las palabras no existirían sin las imágenes, argumentando que las palabras son definiciones de la imagen para poderlas expresar. Además, añaden que los recuerdos, los sueños, las pesadillas, etc., son imágenes y que por ejemplo, los bebés y los animales son capaces de captar imágenes y utilizarlas con su memoria para expresar lo que quieren o necesitan sin mediar palabra.
En contraposición, hay quien dice que para cualquier imagen hay una o muchas palabra (silla, nube, corazón…), pero sin embargo no existe una imagen para cada palabra: Comodidad, inmensidad, amor… La palabra sintetiza y es mucho más concreta que la imagen. En conclusión, se argumenta que hay millones de imagenes para cada palabra, la cuestión es si el que ve la imagen entiende lo que quieres que entienda.
El debate está servido, y todo esto sólo para presentaros un magnífico vídeo ilustrativo que me descubrieron en facebook hace unos días y que vale la pena compartir. Aquí, vemos como el diseño, las tipografías, los tamaños, los colores,… Todo juega un papel muy importante a la hora de transmitir imágenes con palabras, ¿cuántas veces un logo nos ha vuelto locos? Para bien y para mal.
El creador del vídeo, Ji Lee, se planteó un reto: Crear una imagen de una palabra, utilizando únicamente las letras de la palabra en sí. Y para ello, estableció una sola regla: Usar sólo los elementos gráficos de las letras sin la adición de elementos exteriores.
Espero que os haya gustado tanto como a mí. Si queréis dejar vuestra opinión…