Si hace unos días hablábamos de la batalla abierta por Pepsi con su marca competente, hoy tenemos que dar la bienvenida a la «magnífica Navidad» propuesta por Coca-Cola.
Ya está en la red el último spot navideño de la marca estadounidense. Nuevamente aboga por los mismos valores de siempre: amor, alegría, familia, hogar, unión y mucha, mucha felicidad. Así que adiós a la rutina, las malas caras y el aburrimiento. La marca ha creado un vídeo de bella factura visual pero, sin arriesgar, con muchos estereotipos y en mi opinión, nada sorprendente.
Las primeras críticas no se han hecho esperar, es lo que conlleva ser una gran marca que acostumbra a sus clientes a muy buenos trabajos. La audiencia tilda el spot de bastante flojo y no muy original. Es lo que ocurre cuando generas tantas expectativas en los receptores. Malacostumbrarse es muy sencillo y si baja tu listón creativo, a pesar de hacer un muy buen trabajo, te pueden llover las críticas llegando incluso a ponerse en tela de juicio la propia creatividad del sector: «se nota la crisis hasta en la creatividad», decía Ruth Nieto en un blog publicitario.
Bueno, aquí os dejo el spot y… ¡vosotros diréis! ¡¡Se aceptan comentarios!!
Por cierto, cuanto más lo veo, más me gusta y… Me encanta el guiño al osito típico de la marca.